VIDEO | Valeria, madre de dos niñas, fue ultimada en Tepito

En Tepito, uno de los barrios más conocidos y difíciles de la Ciudad de México, la vida cotidiana se vio interrumpida por un crimen que ha dejado a sus habitantes con un sentimiento de impotencia y rabia. Valeria, una madre de dos niñas que se ganaba la vida como vendedora de comida, fue brutalmente asesinada la semana pasada en un acto de violencia que ha dejado huella en la alcaldía Cuauhtémoc.


El cuerpo de Valeria fue encontrado entre montones de basura, después de haber sido arrojado y posteriormente incendiado. La noticia del hallazgo rápidamente se propagó entre los vecinos, quienes quedaron perplejos por la crueldad de lo sucedido. Las imágenes del lugar, capturadas y compartidas por el periodista Carlos Jiménez, muestran veladoras colocadas por los vecinos, como un símbolo de protesta y de luto.

Las autoridades de la Ciudad de México, incluyendo la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) y la Fiscalía General de Justicia (FGJCDMX), han desplegado recursos significativos para esclarecer el caso. Desde el momento en que fue descubierto el cuerpo, se ha iniciado una investigación exhaustiva que involucra la revisión de cámaras de seguridad en la zona, así como la entrevista de posibles testigos que pudieran aportar información clave sobre los responsables.
Hasta ahora, la investigación ha llevado a la detención de tres hombres, quienes fueron interceptados con un arma de fuego, cartuchos, marihuana y un bidón de gasolina, lo que los vincula directamente con el horrendo crimen. Sin embargo, la complejidad del caso ha quedado en evidencia, ya que uno de los sospechosos fue liberado tras su arresto inicial, aunque posteriormente fue nuevamente detenido, pero por delitos relacionados con narcóticos.






Este incidente ha despertado indignación y preocupación en la comunidad. La gente se pregunta cómo es posible que en una zona donde la vida ya es lo suficientemente difícil, sucedan actos de tal brutalidad. La presencia constante de la violencia y la impunidad parece estar siempre presente en las conversaciones, y este caso no ha hecho más que reforzar esas preocupaciones.
Valeria, quien en vida se dedicaba a preparar y vender alimentos, ahora es recordada con tristeza por sus vecinos. Su muerte ha dejado un vacío en su familia y una profunda herida en el barrio. La investigación continúa, y las autoridades aseguran que no descansarán hasta que se haga justicia para Valeria y su familia. La esperanza es que, a pesar de todo, se logre esclarecer el caso y los responsables enfrenten las consecuencias de sus actos.


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